En la industria del cine es muy común que existan adaptaciones de obras literarias a la pantalla grande, pero ¿qué pasa con la propiedad intelectual? Antes de que los guionistas se pongan a escribir y que los productores busquen maneras de financiar el proyecto, el primer paso es obtener los derechos.
Lo anterior no quiere decir que el escritor pierda su autoría, sino que el productor deberá negociar con él o con la editorial para que le concedan ciertas licencias y pueda reproducir la obra. ¿Por qué mencionamos a la editorial? Porque, en ocasiones, cuando los escritores publican sus obras las casas editoriales obtienen la titularidad de los derechos si el autor se los transfirió mediante un contrato de licencia o cesión.
El contrato típico entre autor y editorial se limita a la edición de la obra; sin embargo, también hay casos donde cede o licencia en favor de la editorial derechos como el de adaptación, esto puede hacerlo de dos formas:
- In gere (o en general), la editorial recibe todos los derechos de adaptación de la obra literaria.
- De forma específica, la editorial recibe derechos en particular de acuerdo con lo que se estipule en el contrato.
En cualquier caso, el productor deberá presentar un contrato de adaptación para poder trabajar sobre la obra existente.
Contrato de opción u option agreement
El contrato de adaptación establece varios puntos para respetar los derechos del autor del libro y de la casa editorial; sin embargo, previo a este se recomienda celebrar un contrato de opción u option agreement porque, aunque se empiece a desarrollar el proyecto, no hay garantías de que llegue a la pantalla debido a las diversas dificultades que pueden encontrarse en el camino, sobre todo en materia financiera.
De este modo el contrato de opción reservar un tiempo, por lo general en exclusiva, para que el productor trabaje sobre el proyecto a cambio de un pago menor al del derecho de adaptación, el período puede ampliarse según lo que acuerden las partes, y una vez concluido, el productor acepta o rechaza la oferta de licencia o cesión de derechos de adaptación.
¿Qué puntos debe tener el contrato de adaptación?
Obra objeto de adaptación y resultante
El productor deberá especificar si se adapta una novela para producir el guion de una película o serie de televisión.
La Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) considera la obra audiovisual como independiente del guion, así como de su dirección, de su fotografía o de cualquier otra obra usada para producirla. Lo anterior incluye la obra literaria que en su caso se adapte.
Territorio y la temporalidad
La temporalidad es de suma importancia debido a los tecnicismos derivados de la LFDA que obligan a las partes a establecer cláusulas con plazos de cesión o licencia más amplios de los que ofrece la ley, restringiendo a cinco años la vigencia del contrato.
Pago de regalías o contraprestación
Esto dependerá si se trata de una cesión o una licencia, generalmente las partes establecen el pago por el derecho de adaptación sobre una cantidad fija, pero hay casos donde el productor puede compartir con la editorial un parte del back end de la película o serie.
Consultation rights
Consiste en permitirle al escritor de la obra literaria cierta supervición sobre la adaptación cinematográfica, el control que se le otrogue puede ser total o distendido. Esta cláusula obliga al productor a consultar al autor para esclarecer dudas o precisar conceptos.
Para contar con un contrato de adaptación y contrato de opción correctos, debes contar con la asesoría experta de abogados especializados en propiedad intelectual, de este modo, evitarás lagunas legales que, muchas veces, suceden durante la producción de las películas y que pueden derrumbar todo el proyecto.
En De Hoyos Koloffon® contamos con más de 19 años de experiencia asesorando a los creadores en su registro de derechos de autor.
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